El Modo de Producción capitalistas se ha reajustado y el modelo económico agroexportador, ha sido liquidado. Las nuevas formas de acumulación y reproducción de capital están basadas en una combinación de valorización de capital vía del comercio, los servicios, la industria manufacturera textil, y principalmente del control financiero del dinero, del ahorro, del crédito y de actividades económicas claves para apropiarse del excedente económico interno y de las remesas.
Existen nuevos niveles de desarrollo de las fuerzas productivas, hay una nueva composición de la fuerza de trabajo social según las categorías y grupos ocupacionales por área geográfica y sexo. Hay una redistribución y ajuste de la población urbana y rural afectada por la migración. Las vías de transporte y comunicación hay crecido y mejorado sin llegar a satisfacer las necesidades surgidas.
La dinámica demográfica, las actividades de trabajo de la población, la producción y el ingresos distribuido, la calidad de vida de las clases y capas sociales y el vinculo del comercio exterior muestran los rasgos del ajuste del modo de producción capitalista sufrido en el periodo 1979-2003.
Pero ante la liquidación del modelo económico anterior todavía no hay “motores de acumulación” que le den identidad a este nuevo modelo económico neoliberal.
El nuevo Estado Neoliberal estimula un modelo económico inestable, donde pueden verse algunas características.
Existe una preponderancia del capital dinero y no de la tierra, de la manufactura textil y no la producción industrial, mayor empleo en la ciudad y no el campo, un mayor proletariado urbano junto a una creciente ejército de reserva y disminución del campesinado; mayor peso del proletariado mujer y no el hombre, y en el caso de las capas sociales se ha debilitado la capa militar.
Dentro de las actividades económicas predomina la expansión del comercio de bienes importados y no la producción interior; la expansión de los servicios, en donde los financieros tienen el poder económico, seguida de la producción industrial textil y la disminución en la producción del resto de industrias. Se intensifica la producción diversificada de mercancías agrícolas y no del café, el crecimiento de la caña de azúcar y el crecimiento de los granos básicos. El sector ganadero y la silvicultura son muy dinámicos aunque su peso sea menor.
La facción capitalista financiera hegemoniza y controla el capital dinero, liderando a la clase capitalista dentro del Bloque Hegemónico Empresarial. El campesinado ha sido reducido y empobrecido sometido a un continuo proceso de depauperación o en su defecto, siendo expulsados al exterior.
El proletariado ha crecido en número, pero poco en conciencia, debido a que el grueso, es decir, las mujeres sufren mayor explotación y dominación que los hombres. Las capas surgidas del ajuste del modo de producción son volubles proclives hacia la inercia social. La lucha de clases se libra escondida de la conciencia pública, bajo la lucha entre partidos políticos. Herencia de la situación revolucionaria donde las alianzas entre clases y capas organizadas actúan contra las instituciones controladas por las fuerzas políticas de los capitalistas.
En síntesis el nuevo modelo económico neoliberal es inestable y no esta definido económicamente cuales son las formas particulares de acumulación de capital.
Algunos rasgos de las formas de acumulación son: la valorización mediante el comercio y la venta de servicios así como de la explotación de los trabajadores de estas actividades junto a la maquila.
El nuevo modelo económico esta fundamentado en una fuente y/o uso del excedente basado en la apropiación y control de ahorro, consumo, crédito, inversión y FBK a partir de la captación de las TEN, es decir las remesas familiares.
Su proceso de acumulación indica una producción de mercancías no agrícolas como la predominante y muestra una forma de inserción internacional como proveedores de fuerza de trabajo obrera y campesina al mercado agrícola y urbano, así como vendedores de productos de consumo “nostálgicos” para la masa proletariado salvadoreños en EE.UU., junto a la exportación de mercancías no agrícola al mercado centroamericano.
En términos generales hay un nuevo balance del poder entre las clases y las capas sociales. Los 5 grupos de poder económicos o NFE agrupados en el BHE, son el nuevo rostro de la clase capitalista salvadoreña.
Las masas de proletarios y capas populares no están articuladas en frente organizados, sino descentralizados en pequeños agrupamientos con reivindicaciones sectoriales y diversas.
Las capas de ingresos medios en proceso de depauperación son vacilantes y por lo inestable del modelo económico son vacilantes para aceptar su condición proletaria, viéndose arrastrados por el aparato ideológico de la clase capitalista.